lunes, 22 de julio de 2013

Las rabias y penas con el sistema escolar

Hace un tiempo pude leer este post en Psicología Ceibe que me vino como anillo al dedo. Educar vs Adiestrar, esa es un GRAN tema, temazo para quienes tenemos hijos en edad escolar. Comenté allí la insatisfacción profunda con el sistema escolar, la falta de alternativas reales, las dudas y la aceptación de los propios límites como para pensar en educarlos en casa... y lo difícil que resulta tomar decisiones en este plano.

Mi hijo mayor y el menor sufren diariamente el avasallamiento del sistema que quiere niños modelos y obedientes... y eso que el rendimiento escolar del mayor es excelente, que es lo que nos ha salvado de la derivación al neurólogo.

Mi hija del medio acaba de comenzar en un nuevo colegio, la cambié a mitad de año escolar porque la situación de violencia en su anterior curso y colegio público le estaba haciendo daño.

Yo también intento educar con amor desde el respeto por los propios ritmos e intereses, aunque hay días que el balance me juega en contra, al menos se cual es el camino al cual quiero volver una y otra vez.




Psicologia CEIBE: Educar vs Adiestrar: Por Olga Carmona Publicado originalmente en http://www.pedagogiablanca.com/index.php/item/184-educar-vs-adiestrar "El hijo de...

martes, 16 de julio de 2013

¿Caos u orden? los espacios de juego en una casa con niños

Cuando alguien viene a mi casa suele exclamar con asombro algo así como que mi casa parece un jardín infantil. Algunas personas piensan que es un error que los niños usen los espacios comunes pues los adultos quedamos relegados, sin espacios. Pero yo no puedo sino pensar que en mi casa somos 5, y ellos son cuatro... entonces la casa es de todos y sobre todo es para jugar con más espacio que antes, que vivíamos en departamento.




Hace unos días, Myriam, la mamá de Zambra, me deleitó con un post que es una delicia y un desafío. Ella tiene una  niña y su casa es un espacio de libertad para todos, así que Zambra al jugar no está restringida a su cuarto ni a un lugar específico. Así que Myriam, muchas gracias por compartir el como lo hacen en tu casa, pues me siento menos loca y menos sola.

Yo también he dado la bienvenida a un caos cotidiano, y logro armonizarme un poco al mantener los juguetes en un relativo orden. Aun me cuesta soltarme y disfrutar más, y pensaré bien en eso de que no es necesario guardar un juguete para sacar otro, no es primera vez que esa reflexión cala en mi sentir.

Aca pueden leer el post de Myriam: en minúsculas: Jugar, jugar sin parar.:  A mis padres, por permitirnos jugar y jugar como locas, sin restricciones, durante horas… Lo confieso,...

viernes, 12 de julio de 2013

Qué hacer en casa cuando nuestros hijos comienzan la sala cuna

Cuando debemos separarnos de nuestros pequeños para retomar el trabajo o estudio, nos preguntamos si debemos acostumbrarlos a lo que vivirán más adelante en la sala cuna o jardín o con alguien de confianza. Acá pueden leer un excelente artículo de que nos invita a reflexionar sobre qué es mejor para el bebe cuando nos vemos en la obligación de llevarlo a la sala cuna, lo cual puede resumir en apego apego y más apego en casa, eso le permitirá mantener la confianza en la madre y percibir la perdida de afecto y contacto permanente con algo temporal.




Psicología Infantil y Crianza con Apego: Desmontando falsas creencias sobre cómo favorecer la adaptación a la sala cuna...: Consulta:   Tengo una consulta respecto a mi bebé. Tiene 3 meses, desde el principio duerme conmigo (su padre se mueve mucho así que no...

viernes, 5 de julio de 2013

Aceptarnos como somos: Ser madres con lo que tenemos

Ileana Medina, del Blogg Tenemos Tetas, es una de estas mujeres que ponen en palabras lo que muchas sentimos y no podemos o no nos atrevemos a expresar. La transcribo acá porque leerla me da fuerzas, me contiene, me emociona.


Ser Madres con lo que tenemos
Con nuestros traumas.
Nuestras infancias heridas.
Nuestras miserias y nuestros miedos.
Con nuestras historias familiares de horror y misterio.
Nuestras rabias y nuestras fobias.
Nuestras imperfecciones.
Nuestros kilos de más.
Nuestros euros de menos.
Nuestros trabajos alimenticios, de supervivencia.
Nuestras mañanas desquiciadas.
Nuestros gritos y nuestras lágrimas.
Nuestras madres niñas. Nuestras suegras brujas.
Nuestras cicatrices.
Nuestras enfermedades.
Nuestros pueblos feos.
Nuestros vecinos ruidosos.
Nuestros políticos estúpidos, corruptos, repugnantes.
Nuestras escuelas decimonónicas, tristes, cuadriculadas.
Nuestros maridos currantes, intentando ser hombres, amantes, amables, y no morir en el intento.
Nuestros divorcios.
Nuestro estrés.
Nuestros años.
Nuestra soledad.
Nuestros partos robados, anestesiados, maltratados.
Nuestras lactancias agrietadas, dolorosas, imposibles.
Nuestra neurosis.
Con este mundo asfixiante que no está diseñado para tener hijos y no lo pone nada fácil, pero los niños son lo único que lo hace más habitable, más esperanzador.
Ser madres como podemos.
Ese es el mérito.